Las personas obedecen y reaccionan de manera individual a lo que los medios de comunicación les transmite. Desde tiempos de primera y segunda guerra, es cuando se empieza a estudiar el fenómeno de aguja hipodérmica, y cómo de esta forma se puede manipular la mente de las personas, con información por llamarla “conveniente” que resulte a favor de los gobernantes. Es la forma en que “inyectan” la información al público objetivo en su rama o campo de acción, donde se obtienen resultados que desde un principio se pensaron y esperaron.
Los individuos los van agrupando en masas donde los van orientando hacia un interés en específico, con la forma de entender que “el que no piense como los demás, está condenado a ser señalado por la sociedad” es por eso que las personas a veces realizan acciones ajenas a su gusto o voluntad, simplemente para estar en contexto con “el resto” y no ser señalado. El filósofo José Ortega y Gasset habla sobre las masas, y plantea lo dicho sobre la aguja hipodérmica y las masas “la masa arrolla todo lo diferente, egregio, individual, calificado y selecto. Quien no sea como todo mundo, quien no piense como todo mundo, corre el riesgo de ser eliminado” (Ortega y Gasset, 1930, p.19)
Harold Lasswell en el año 1948 expone el modelo de la aguja hipodérmica, que se relaciona de esta forma:
Análisis del emisor: Quien dice
Análisis de contenido / mensaje: Qué
Análisis de medio: En qué canal
Análisis de la audiencia: A quién
Análisis del efecto: Con qué efecto
Vemos similitud en el modelo de preguntas utilizado para dar una información como los son las 5 W (Qué, quién, cómo, cuando, donde) y como el emisor está enviando el estímulo al receptor que es considerado pasivo, aislado, anónimo para obtener lo que se pretende, no solamente a las personas sino a las masas en general.
Commentaires